30 de abril de 2010

Hogar felino

A estas alturas y aunque parezca increible, dentro de los lugares abandonados seguimos encontrando componentes que nos sorprenden de un modo u otro. Esta casa rural no iba a ser una excepción. En esta ocasión, la máxima de no llevarse nada del lugar se hizo muy difícil de cumplir. ¿A quién no le hubiese gustado llevarse uno? Pero las normas son las normas, y están para cumplirlas.


















3 comentarios:

  1. Qué sitio!!!!Y qué MONOS!!!!!!Yo me hubiera llevado uno fijo, jajajajajaa, lo siento por las normas... ;P

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  2. Monos no, gatos ;-)

    Si que tuve la tentación de llevarme uno si, más aún porque en la habitación de al lado vimos un gato muerto. Quiero creer que no era la madre porque ya llevaba bastantes días descompuesto, por lo que de ser la madre no tendrían los gatitos el aspecto tan saludable que tenían.

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  3. vaya con los gatos menuda casa tienen, para algunos no hay crisis jajjaaa

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